Historia
Tanto bien desde 1954
En el año 1954 comenzaba una ilusión que compartimos con nuestros primeros ciento ochenta alumnos de enseñanza primaria y los primeros cursos de bachillerato. Con los años, nuestro colegio ha crecido y se ha transformado; las instalaciones han pasado por sucesivas ampliaciones y remodelaciones para dar la bienvenida a una comunidad que hoy cuenta con más de mil novecientos estudiantes, desde el segundo ciclo de Educación Infantil hasta Bachillerato. Hoy, el Colegio Claret no es el mismo de entonces; tampoco lo es el barrio que nos acoge, pero seguimos adelante con el mismo entusiasmo que nos inspiró en nuestros comienzos.

Creciendo
En familia,
junto a las familias
A lo largo de estas décadas, han pasado muchas generaciones de alumnos y familias que han confiado en nuestro proyecto educativo. Nos sentimos profundamente agradecidos por la colaboración y la energía de los profesores, profesoras y demás personal que han trabajado y siguen trabajando con nosotros. La presencia de los religiosos claretianos se ha ido combinando cada vez más con la de seglares, que han asumido con ilusión y responsabilidad cargos de dirección, coordinando etapas, departamentos y tutorías. En todo este tiempo, diversas juntas de asociaciones de familias y monitores deportivos y de pastoral han enriquecido nuestra labor. A todos ellos, y a las familias que han sido parte de este proyecto, les agradecemos de corazón por mantener viva esta ilusión que nos une.
Hoy
Un proyecto vivo y comprometido
Hoy, el Colegio Claretianos de Madrid es un referente educativo que acoge a más de 1,900 alumnos desde Educación Infantil hasta Bachillerato. Contamos con un equipo de educadores comprometidos y vocacionales, tanto religiosos como laicos, que trabajan cada día para ofrecer una educación personalizada y centrada en la inclusión. Con un modelo pedagógico que combina lo digital y lo analógico, y con un entorno colaborativo que involucra activamente a las familias, seguimos firmes en nuestra misión: formar personas íntegras, capaces de enfrentar los retos del futuro con confianza, valores y espíritu de servicio.
Desde 1954, seguimos fieles a nuestro compromiso de educar con el corazón, manteniendo viva la ilusión de formar personas comprometidas con su mundo y con los valores que transforman.